El manzano es un árbol de la familia de las Rosáceas originario de Asia Central y de las regiones de caucaso.
Acción curativa
La manzana cocida en forma de jalea es un buen ungüento para los dolores reumáticos, friccionándose las partes afectadas libremente, a cualquier momento.
Es un excelente alimento para el cerebro; excita la acción del hígado, provoca el sueño tranquilo, desinfecta la boca. Ayuda a las secreciones renales, impide la formación de cálculos, impide las indigestiones y es uno de los mejores preventivos contra afecciones de la garganta.
La manzana comida con cascara, es muy buena para combatir la pobreza de la sangre, disminuye la acidez del estomago y además cura flatulencias y nauseas. La cura de manzanas es muy depurativas está indicada como útil en las enfermedades crónicas del sistema nervioso de los adultos, en especial en la debilidad nerviosa.
Una dieta consiste principalmente en manzanas es excelente para curar la embriaguez y el habito de fumar por su riqueza de hierro, se recomienda contra la anemia y clorosis. Contra los accesos asmáticos también es eficaz pues facilita la actividad pulmonar.
La manzana asada es excelente para fortalecer el cerebro, así como para combatir la neumonía, bronquios, toses rebeldes, etc. Para estos casos se comerá todas las mañanas en ayunas, contra las ronqueras y los resfríos se rellenará con miel de abeja.
La manera de suministrar la manzana en todos aquellos casos de transtornos gastrointestinales de los niños, como los catarros, diarreas y aun disenterías agudas y crónicas es de la siguientes formas; se toma una o dos manzanas completamente maduras y suaves, se ralla o raspa con un rallador o una cucharita para que resulte una especie de puré crudo. Esta papilla se les dará a la dosis de 2 a 4 cucharadas de acuerdo a la edad y apetito del niño, cada una o dos horas durante dos días. En todo este tiempo se le dará para la sed solamente infusión de manzanilla o cualquier otra hierba medicinal.
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